La recta final del #CanonAEDE en el Senado

Nuestras leyes son los ríos, que van a dar al Senado, que no es el morir, pero sí lo más parecido a un cementerio de elefantes que tenemos en la política española. Y en esta cámara se encuentra ahora la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual que incluye el canon exigido por los grandes periódicos agrupados en AEDE.

El día 17 de septiembre se agotó el plazo para presentar vetos y enmiendas, lo que significa que ahora mismo se supone que los distintos grupos están enzarzados en debatir las bondades y las flaquezas del texto enviado por el Congreso y de los cambios propuestos por los senadores. En la propia web del Senado podemos ver que el Partido Popular ha propuesto hasta cinco enmiendas a su propio texto de la LPI, pero ninguna referida al las disposiciones que modifican el artículo 32.2 de la LPI. El PP sigue adelante con el canonazo.

EL PSOE, por su parte, mantiene la postura de que un canon debería beneficiar a los autores y no a los editores. Domingo Fuentes, senador socialista, asegura que están en contra de la ley y que han presentado veto a la totalidad, pero como lo dan por derrotado gracias a la mayoría absoluta de los conservadores, apuestan por reclamar al menos que se elimine la irrenunciabilidad de la mal llamada tasa Google.

Al veto de los socialistas se unen el de Izquierda Unida, ERC, EA, dos de Entesa catalana y uno de diputados vascos independientes. Nadie quiere esta reforma de la LPI. Si atendemos a la rumorología parlamentaria, ni siquiera los senadores populares están convencidos de la conveniencia de este nuevo texto. En general, se considera una ley, tal y como está planteada, innecesaria, mal fundamentada y hecha con una urgencia incomprensible.

Entre tanto, a consecuencia de la suspensión del Tribunal Supremo de la Ley Lassalle, el gallinero se sigue revolviendo. Las gestoras se han unido a la oposición de dicha ley, al menos en lo que a compensación por copia privada se refiere. Y una de esas gestoras es CEDRO, quien se supone que cobraría el canon AEDE. Por tanto, CEDRO, uno de los principales beneficiarios del canonazo se posiciona en contra de la LPI que debería salir del Senado antes de que concluya octubre, según los plazos previstos.

Es importante que el PP no ha cambiado los aspectos más controvertidos del canon por copia privada sobre los que deberá decidir el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Por tanto, si el TJUE decide en contra, la LPI deberá ser modificada de nuevo en los próximos meses. Las prisas por aprobarla en su forma actual no tienen ningún sentido si no consideramos el poco oculto interés del Gobierno de agradar a las grandes cabeceras de periódicos de este país.

En mitad de este sinsentido seguimos los ciudadanos, exigiendo que se nos escuche y negándonos a sufrir un nuevo canonazo a nuestros bolsillos y nuestra libertad de expresión e información. Por eso seguimos actuando.